Aunque el festival ha llegado a su fin, seguiremos apuntando nuestras crónicas de las impresiones dia a dia, además de empezar a compaginar las primeras reseñas de la abultada programación asiática que hemos podido disfrutar.
Nos quedamos en el Martes, sexto día de Festival, un dia en apariencia tranquilo, pasabamos ya la mitad del festival y apenas había una pelicula por la mañana, la extremadamente bien recibida The Raid del director de Merantau, Gareth Huw Evans; después de comer teníamos previsto asistir a la charla con los tres directores surcoreanos presentes en Sitges, Na Hong-jin, Ryu Seung-wan y Yim Pil-sung, y después de la medianoche comenzaba la maratón Japan Madness con el Ninja Kids! de Miike, dos titulos de Sushi Typhoon, Karate Robo Zaborgar y Yakuza Weapon, y otro film de Noburu Iguchi, Tomie Unlimited. Las apariencias engañan, y es que a última hora intentamos incluir en el menú the Woman de Lucky McKee pero lo tuvimos que dejar pasar porque el cuerpo dijo que necesitaba un descanso.
Nos sorprendía, por tratarse de dia laborable, un Cine Retiro lleno a las diez de la mañana para ver la nueva sensación del cine de acción del sudeste asiático, el primer pase de The Raid de Gareth Evans, que creo que ha sido de las pocas peliculas de las que hemos oído elógios unánimemente.
La verdad es que hay poquito que explicar porque todo se basa en su punto de partida: un grupo especial de la policia entra a un edificio tomado por un jefe del crimen y su banda.
La mejor pelicula de acción del 2011 no da tregua, y es que seguiremos a los policias subiendo piso a piso, intentando asegurar planta por planta un bloque de apartamentos plagado de trampas, grupos de asesinos, traidores y muchas cosas más.
Una barbaridad non-stop de acción despampanante, que tiene para todos los gustos, montañas de balas, peleas a cuchillo salvajes (pocas veces he visto apuñalar con tanta velocidad y malicia), y coreografías de lucha cuerpo a cuerpo sensacionales, en las que destaca el aprovechamiento del escaso escenario consiguiendo momentos impactantes.
Dudo que este año salga un titulo de acción que se acerque siquiera a quitarle la corona a The Raid.
Después de comer teníamos el encuentro con los tres directores coreanos presentes en el Festival, un adormilado Na Hong-jin, presente para el estreno de The Yellow Sea, y Ryu Seung-wan y Yim Pil-sung, a los que pudimos ver muchos días ya que estaban como miembros del jurado.
La charla se centró en la situación del cine en Corea del Sur de una manera general, explicaron el estado de las cosas tras el cambio en la cuota de cine nacional, las dificultades de distribución si la pelicula no pertenece a uno de las macroempresas que controlan no sólo el mercado de producción, sino también las salas de distribución, así como la bajada de cantidad de títulos en general.
Con un mercado del dvd muy flojo, incidieron en el tema de la piratería en su pais, donde según el director de Arahan "te puedes bajar una pelicula mientras vas en el autobús", un tema en el que se los veía muy serios, más todavía cuando comentaron como el Ministerio de Cultura tiene menos presupuesto que la organización ue controla la piratería.
Al comentarles como estaba la situación en España, y como muchos nos habíamos adentrado en el cine coreano gracias a las descargas, prefirieron decir que cada pais se encargue de su piratería, y que siempre nos quedaban las ediciones en dvd coreanas con subtitulos en inglés como recurso legal.
Dejando el tema, Seung-Wan, que llevó el peso de la conversación en buena parte del coloquio, fue preguntado por su relación con Park Chan-wook, amigos desde antes de ser directores de cine, y Yim Pil-sung por su trabajo en "Hansel y Gretel".
Fue un encuentro muy interesante al poder conocer la situación de la indústria del cine de primera mano.
Para acabar, nos enfrentabamos a la maratón de medianoche Japan Madness. De los cuatro títulos acabamos viendo tres -el sueño nos venció-, dos de ellos muy recomendables y un tercero decepcionante.
Comenzamos con Karate Robo Zaborgar, en el que el director de Machine Girl, Noboru Iguchi, rescata una serie tokusatsu de los 70 del mismo nombre, haciendo una puesta al día divertidísima, con un guión de lo más cachondo -y esta vez sin siquiera una tetilla ni rios de sangre- y buenos efectos especiales.
En los titulos de crédito finales aparecían imágenes del original y pudimos comprobar como muchas de las cosas que vemos en el film aparecían en la serie, para mayor despiporre general.
De visión obligatoria para los fans del tokusatsu, muy recomendable para fans del cine un poquito más pasado de vueltas.
Seguía Ninja Kids! de Takashi Miike, su versión de Nintama Rantaro, y esta vez si, la primera película enteramente infantil del director de Osaka, límpia limpísima y para todos los públicos.
Muy divertida, seguimos las peripecias de Rantaro en la escuela de ninjas, con mucho humor ya que que de los golpes aparecen chichones de goma roja y los profesores tienen que tener mucho cuidado al enseñar a lanzar las estrella ninja.
Quizás no interese a los fans del cine extremo de Miike, pero nos ha parecido una pelicula encantadora, muy entretenída y con algunos momentos brillantes.
Para verla con los hijos o sobrinos y un buen bol de palomitas.
La tercera y última para nosotros fue la decepcionante Yakuza Weapon, que me aburrió hasta dormirme. Me gustará recuperarla y darle una segunda oportunidad en un horario más normal, pero aunque Tak Sakaguchi interpreta a un personaje divertido, un matón de pocas luces, la história es muy pesada hasta el tramo final, en que comienza la acción pura y dura.
Después de eso, quedaba Tomie Unlimited, pero otra vez será: eran ya las 7 de la mañana y en unas horas nos esperaba Gantz: Perfect Answer, Apolo 18 y la francesa Livide de Maury y bustillo, el duo de A l´interieur.
Nos quedamos en el Martes, sexto día de Festival, un dia en apariencia tranquilo, pasabamos ya la mitad del festival y apenas había una pelicula por la mañana, la extremadamente bien recibida The Raid del director de Merantau, Gareth Huw Evans; después de comer teníamos previsto asistir a la charla con los tres directores surcoreanos presentes en Sitges, Na Hong-jin, Ryu Seung-wan y Yim Pil-sung, y después de la medianoche comenzaba la maratón Japan Madness con el Ninja Kids! de Miike, dos titulos de Sushi Typhoon, Karate Robo Zaborgar y Yakuza Weapon, y otro film de Noburu Iguchi, Tomie Unlimited. Las apariencias engañan, y es que a última hora intentamos incluir en el menú the Woman de Lucky McKee pero lo tuvimos que dejar pasar porque el cuerpo dijo que necesitaba un descanso.
Nos sorprendía, por tratarse de dia laborable, un Cine Retiro lleno a las diez de la mañana para ver la nueva sensación del cine de acción del sudeste asiático, el primer pase de The Raid de Gareth Evans, que creo que ha sido de las pocas peliculas de las que hemos oído elógios unánimemente.
La verdad es que hay poquito que explicar porque todo se basa en su punto de partida: un grupo especial de la policia entra a un edificio tomado por un jefe del crimen y su banda.
La mejor pelicula de acción del 2011 no da tregua, y es que seguiremos a los policias subiendo piso a piso, intentando asegurar planta por planta un bloque de apartamentos plagado de trampas, grupos de asesinos, traidores y muchas cosas más.
Una barbaridad non-stop de acción despampanante, que tiene para todos los gustos, montañas de balas, peleas a cuchillo salvajes (pocas veces he visto apuñalar con tanta velocidad y malicia), y coreografías de lucha cuerpo a cuerpo sensacionales, en las que destaca el aprovechamiento del escaso escenario consiguiendo momentos impactantes.
Dudo que este año salga un titulo de acción que se acerque siquiera a quitarle la corona a The Raid.
Después de comer teníamos el encuentro con los tres directores coreanos presentes en el Festival, un adormilado Na Hong-jin, presente para el estreno de The Yellow Sea, y Ryu Seung-wan y Yim Pil-sung, a los que pudimos ver muchos días ya que estaban como miembros del jurado.
La charla se centró en la situación del cine en Corea del Sur de una manera general, explicaron el estado de las cosas tras el cambio en la cuota de cine nacional, las dificultades de distribución si la pelicula no pertenece a uno de las macroempresas que controlan no sólo el mercado de producción, sino también las salas de distribución, así como la bajada de cantidad de títulos en general.
Con un mercado del dvd muy flojo, incidieron en el tema de la piratería en su pais, donde según el director de Arahan "te puedes bajar una pelicula mientras vas en el autobús", un tema en el que se los veía muy serios, más todavía cuando comentaron como el Ministerio de Cultura tiene menos presupuesto que la organización ue controla la piratería.
Al comentarles como estaba la situación en España, y como muchos nos habíamos adentrado en el cine coreano gracias a las descargas, prefirieron decir que cada pais se encargue de su piratería, y que siempre nos quedaban las ediciones en dvd coreanas con subtitulos en inglés como recurso legal.
Dejando el tema, Seung-Wan, que llevó el peso de la conversación en buena parte del coloquio, fue preguntado por su relación con Park Chan-wook, amigos desde antes de ser directores de cine, y Yim Pil-sung por su trabajo en "Hansel y Gretel".
Fue un encuentro muy interesante al poder conocer la situación de la indústria del cine de primera mano.
Para acabar, nos enfrentabamos a la maratón de medianoche Japan Madness. De los cuatro títulos acabamos viendo tres -el sueño nos venció-, dos de ellos muy recomendables y un tercero decepcionante.
Comenzamos con Karate Robo Zaborgar, en el que el director de Machine Girl, Noboru Iguchi, rescata una serie tokusatsu de los 70 del mismo nombre, haciendo una puesta al día divertidísima, con un guión de lo más cachondo -y esta vez sin siquiera una tetilla ni rios de sangre- y buenos efectos especiales.
En los titulos de crédito finales aparecían imágenes del original y pudimos comprobar como muchas de las cosas que vemos en el film aparecían en la serie, para mayor despiporre general.
De visión obligatoria para los fans del tokusatsu, muy recomendable para fans del cine un poquito más pasado de vueltas.
Seguía Ninja Kids! de Takashi Miike, su versión de Nintama Rantaro, y esta vez si, la primera película enteramente infantil del director de Osaka, límpia limpísima y para todos los públicos.
Muy divertida, seguimos las peripecias de Rantaro en la escuela de ninjas, con mucho humor ya que que de los golpes aparecen chichones de goma roja y los profesores tienen que tener mucho cuidado al enseñar a lanzar las estrella ninja.
Quizás no interese a los fans del cine extremo de Miike, pero nos ha parecido una pelicula encantadora, muy entretenída y con algunos momentos brillantes.
Para verla con los hijos o sobrinos y un buen bol de palomitas.
La tercera y última para nosotros fue la decepcionante Yakuza Weapon, que me aburrió hasta dormirme. Me gustará recuperarla y darle una segunda oportunidad en un horario más normal, pero aunque Tak Sakaguchi interpreta a un personaje divertido, un matón de pocas luces, la história es muy pesada hasta el tramo final, en que comienza la acción pura y dura.
Después de eso, quedaba Tomie Unlimited, pero otra vez será: eran ya las 7 de la mañana y en unas horas nos esperaba Gantz: Perfect Answer, Apolo 18 y la francesa Livide de Maury y bustillo, el duo de A l´interieur.
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