Simpática película que combina el drama y la comedia a la perfección para darnos un drama familiar ambientado en las triadas.
Un respetado jefe de las triadas ve como su vida cambia tras conocer una abogada defensora de la que acaba enamorado y teniendo una hija.
Su mundo se tambaleara ya que vera imposible compaginar su vida de dulce y amado padre, con el de violento y respetado jefe.
Debe elegir uno de ellos, aunque no es fácil, si deja uno puede acabar muerto, si deja el otro acabara siendo odiado y repudiado por su familia.
La película se aleja de los clichés habituales de las películas de las triadas, y se centra mas la evolución y cambio de un miembro de las triadas tras el nacimiento de su hija, todo ello con mucha ternura, y un tono bastante realista y muy ligero.
Además de contar con un guion muy inteligente e ingenioso (aunque quizá un poco falto de desarrollo, sobretodo en personajes), y una dirección de Sylvia Chang (20 : 30 : 40) impecable y muy atractiva; la película destaca por la sobresaliente y divertida actuación de Louis Koo que interpreta con gran carisma, al pícaro y encantador protagonista que es capaz de todo (bueno todo lo posible y lo que le dejen) por su hija, desde cambiar de religión, a cambiarse un tatuaje "peligroso" por uno "dulce", hasta intentar reformarse. Koo, además, maneja de manera excelente diversos cambios de registros del personaje durante la película.
Quizás a esta película le falle su ejecución, pero aun así, estamos ante una entretenida y divertida película con ciertos toques dramáticos, que por su buena realización, su buen ritmo y sobretodo por Louis Koo, cabe destacar.
Puntuación 6.5/10
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