Johnie To y su colaborador Wai Ka Fai vuelven al ataque con otra pelicula de policias,pero esta vez ,con el protagonismo para un detective pirado, capaz de ver la personalidad que esconde cada persona.
Había muchísimas ganas de ver otra peli más de To; el año pasado nos alucinó con Exiled y a mi me dejo impresionadisimo su Election 2.No hay muchos directores que puedan decir que son capaces de rodar dos peliculas sobresalientes en el mismo año.
Después de ver su participación en Triangle,la espectación era alta por ver que nos traía To con su colaborador ya habitual Wai Ka Fai, protagonizado además por Lau Chin Wan,un actor al que admiramos mucho.
El resultado es muy bueno,no es una obra maestra,pero si otra buena pelicula en el curriculum del director,con algunas lagunas,pero en general más aciertos que errores.
La desaparecida pistola de un policia se ve conectada con una serie de crimenes; el dueño de la misma desaparece misteriosamente una noche persiguiendo a un sospechoso,mientras que su compañero aparece sin ningún rasguño.
El detective asignado al caso sabe qeu su única opción pasa por pedir ayuda a su mentor,un detective retirado por enfermedad mental; se volvió loco, y en la fiesta de despedida del Inspector Jefe le cortó una oreja y se la ofreció como regalo.
Eso si,este detective tiene la habilidad, o la maldición, de ver en las personas no el físico,sino lo que esconde en el subsconciente.
Esta no es la típica pelicula de polis,desde luego.
Aunque parte con un planteamiento muy interesante,una trama atractiva, y cuenta con un grande del cine HK como Lau Ching Wan en un papel que borda,algo falla para que la considere una obra al nivel de las últimas cuatro de To.
Quizás sea por esa indecisión,ese medio camino entre el drama personal de un personaje que vive en su propio mundo,y una trama policial clásica, que el resultado final no sea tan impactante como esperaba.
Pero no me malinterpreteis; un film mediano de To sigue siendo un film más que recomendable. La ambientación, la apariencia y, en definitiva, el estilo, siguen ahí.Y es que viendo sus films,uno se siente cómodo,como en casa.Su HK es un lugar reconocible,poblado de personas de todo menos aburridas, donde los polis viven para el trabajo, y los criminales tienen sus propios traumas.
Un mundo en que los tratos se hacen delante de un bol de ramen.
Y todo eso está en Mad Detective,eso y más.Y es que esta vez la presencia de ese detective pirado del titulo lo absorbe todo,es el protagonista absoluto de la función, y la genialidad de To es mostrar no solo la realidad, sino también lo que ve el loco, aunque eso a veces suponga confundir al espectador.
Había muchísimas ganas de ver otra peli más de To; el año pasado nos alucinó con Exiled y a mi me dejo impresionadisimo su Election 2.No hay muchos directores que puedan decir que son capaces de rodar dos peliculas sobresalientes en el mismo año.
Después de ver su participación en Triangle,la espectación era alta por ver que nos traía To con su colaborador ya habitual Wai Ka Fai, protagonizado además por Lau Chin Wan,un actor al que admiramos mucho.
El resultado es muy bueno,no es una obra maestra,pero si otra buena pelicula en el curriculum del director,con algunas lagunas,pero en general más aciertos que errores.
La desaparecida pistola de un policia se ve conectada con una serie de crimenes; el dueño de la misma desaparece misteriosamente una noche persiguiendo a un sospechoso,mientras que su compañero aparece sin ningún rasguño.
El detective asignado al caso sabe qeu su única opción pasa por pedir ayuda a su mentor,un detective retirado por enfermedad mental; se volvió loco, y en la fiesta de despedida del Inspector Jefe le cortó una oreja y se la ofreció como regalo.
Eso si,este detective tiene la habilidad, o la maldición, de ver en las personas no el físico,sino lo que esconde en el subsconciente.
Esta no es la típica pelicula de polis,desde luego.
Aunque parte con un planteamiento muy interesante,una trama atractiva, y cuenta con un grande del cine HK como Lau Ching Wan en un papel que borda,algo falla para que la considere una obra al nivel de las últimas cuatro de To.
Quizás sea por esa indecisión,ese medio camino entre el drama personal de un personaje que vive en su propio mundo,y una trama policial clásica, que el resultado final no sea tan impactante como esperaba.
Pero no me malinterpreteis; un film mediano de To sigue siendo un film más que recomendable. La ambientación, la apariencia y, en definitiva, el estilo, siguen ahí.Y es que viendo sus films,uno se siente cómodo,como en casa.Su HK es un lugar reconocible,poblado de personas de todo menos aburridas, donde los polis viven para el trabajo, y los criminales tienen sus propios traumas.
Un mundo en que los tratos se hacen delante de un bol de ramen.
Y todo eso está en Mad Detective,eso y más.Y es que esta vez la presencia de ese detective pirado del titulo lo absorbe todo,es el protagonista absoluto de la función, y la genialidad de To es mostrar no solo la realidad, sino también lo que ve el loco, aunque eso a veces suponga confundir al espectador.
Como decía,Lau Ching Wan está tremendo en su papel, dando el toque dramatico cuando se requiere,aportando el lado desquiciado del personaje cuando es necesario.Fenomenal,hacía tiempo que no le veíamos en nada nuevo.
Seguramente en un segundo visionado,sabiendo lo que voy a ver,la nota mejoraría bastante.
6´5 de 10
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