Osaka Hamlet es la historia de la familia Kubo. La madre lleva una doble vida, trabaja en un hospital de día y regenta un night club por las noches. Tras la muerte de su marido, un hermano de éste aparece en su vida y se convierte en su nuevo compañero. Su hijo Yukio tiene problemas al ver que su padre ha sido sustituido por un tío al que apenas conoce. Un profesor le regala a Yukio una copia de Hamlet, esperando que encuentre paralelismos con la vida del príncipe danés, pero aunque le fascina, el texto solo parece aumentar su angustia, mientras trata de enfocar su vida entre apariciones espirituales y las habituales peleas con los chicos de su edad. Hasanori, el hijo pequeño, valiente y ambiguo, admira con locura a su tía enferma, a quien le dice que de mayor quiere ser una chica. Masashi, el hijo bueno, se enamora de una mujer mayor que él y vive una curiosa historia de amor. Después de todas estas experiencias, los personajes parecen encontrar su lugar y la vida continúa.
Basada en el exitoso manga homónimo de Hiromi Morishita, se nos presenta una familia disfuncional que tras la muerte del patriarca debe afrontar su nueva situación.
Estamos ante una conmovedora película en donde se compagina el humor y el drama de manera excepcional. Estamos ante una película muy ligera y divertida pero al mismo tiempo trágica, con unos personajes muy bien definidos que van evolucionando en el transcurso de la película, mientras se enfrentan a las adversidades más o menos comunes de la vida, de manera que les vas cogiendo cariño mientras transcurre la encantadora historia.
Todos los personajes van encontrando su sitio en la “nueva familia” desde la madre y el tío, a los tres hijos de la familia, aunque sin duda es a estos a quien más protagonismo otorga la historia.
Los tres chavales protagonistas de la historia están estupendos, con una actuación muy fresca y natural, aunque es difícil quedarse con la historia de uno de ellos, es quizá la de Yukio, la que más me ha gustado, y que es la que da nombre a la historia. Interpretado por Naoyuki Morita (Tetsujin 28), Yukio, es el “macarra” de la escuela que gracias a la novela de Shakespeare cambia su vida, la lectura de esta compleja obra en un principio “puede con él” pero poco a poco empieza a valorarla, y le ayuda a continuar y enfrentarse a la vida.
Osaka Hamlet ha sido toda una agradable sorpresa, una película tierna, optimista y “modesta” con cierto aire a cine independiente americano, que me descubre un desconocido director, Fujiro Mitsuishi, que desde ya habrá que seguir.
Puntuación 8/10
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2 comentarios:
Que bien que has podido ver algunas de las películas del BAFF, la verdad es que ésta le tengo ganas, en cuanto aparesca la veré.
Saludos.
La verdad es que este año es el que mas hemos podido ver, aun asi, no veremos todas las que quisieramos, mas que por el tiempo por la pasta :(
Me queda unas cuantas reseñas de pelis que hemos visto ya, y ya esta, no creo que vayamos a ver mas pelis que la coreana, Breathless (aunque espero que caigan un par mas).
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