Be with me, de Eric Khoo.

Eric Khoo, el director de la esperada "Tatsumi" ya era un viejo conocido en el circuito festivalero, incluido Cannes, cuando en 2005 se presento con esta pelicula, "Be with me", un docu-drama sobre la soledad. A traves de cuatro histórias el director habla sobre la soledad en ambientes diferentes: la de una adolescente que rompe con su pareja, la de un timido guardia de seguridad enamorado de una mujer que trabaja en el mismo edificio en el que el trabaja, la de un anciano viudo que acaba de perder a su mujer, y la de una mujer que aún sorda y ciega sigue luchando por disfrutar la vida y ayudar a los demás.


Las tres primeras histórias se van desarrollando en la primera parte de la pelicula de manera extremadamente silenciosa, incluso en la parte del romance entre las dos adolescentes, cuya relación se cimenta más en gestos y mensajes de texto por móvil que en conversaciones. Es muy interesante como el director refleja el uso del movil en esta história, y como lo utilizan los personajes en la ruptura, un distanciamiento más en la comunicación, como metáfora funciona de manera perfecta.
La história del guarda de centro comercial es la más inocente, entre la ternura, la tristeza y el patetismo de un hombre bonachón y tímido, pero también pusilánime en un "amor imposible". Sus esfuerzos por escribir una carta de amor a su amada, una mujer con la que no se ha atrevido ni a cruzar una mirada, ya ni hablemos una palabra, no acaban teniendo premio porque el destino, cuando menos nos lo esperamos, nos da la vuelta.


Finalmente estan las histórias del viudo y de la anciana ciega y sorda, que se solapan en la segunda parte de la película, cási por completo. El nexo de unión de las dos histórias es el hijo del viudo, que se encarga de ayudar a la mujer ciega y sorda. Esta es la história más emocionante, al tratarse al fin y al cabo de un testimonio real el de la mujer que se interpreta a si misma, Theresa Chan.
Sorda desde muy pequeña, perdió muy pronto también la vista, con lo que quedó aislada físicamente del mundo. A pesar de eso, y gracias al interés de algunos doctores y sobretodo a su enorme fuerza de voluntad fue capaz de aprender a comunicarse, aprender incluso inglés, vivir una vida intensa y usar su tiempo ayudando a personas con deficiencias como las suyas. Su testimonio es emocionante, inspirador y hace que veamos la vida de otra manera.

Be with me no es una pelicula fácil de ver: el ritmo es extremadamente lento, el seguimiento de las histórias es cási documental, con escenas muy largas sin apenas montaje, pero vale la pena tener un poco de paciencia, amoldarnos al ritmo y disfrutar de una pelicula que a pesar de tener tres histórias dramáticas acaba teniendo un mensaje vitalista gracias a esa história tan inspiradora.


7´5 de 10

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