Mucho ruido y pocas nueces se podría decir de esta película que se vende como una de las sensaciones tailandesas de los últimos años, cuando no estamos mas que, ante otro thriller que para destacar se recurre fácilmente a la violencia y la polémica, dando como resultado falsa innovación y sorpresa.
Entre el slasher y el thriller, Slice, nos cuenta la historia de un joven que se ve obligado a seguir la pista de un asesino en serie que esta relacionado con su infancia, mientras que profundiza en sus problemas tanto presentes como pasados, con continuos flashbacks.
El director y guionista Wisit Sasanatieng (Citizen Dog) se alía con el director Kongkiat Khomsiri (Art of the Devil 2) para traernos esta desgarradora, barroca y grotesca historia sobre la redención, el despertar sexual, la angustia adolescente, la corrupción y los malos tratos.
Entre tanta mutilación, sangre y sexo, nos encontramos un thriller simplemente correcto lleno de agujeros, que peca de pretencioso y de ritmo lento, pero que destaca visualmente por su dirección y fotografía, además de por su atmosfera deprimente y decadente.
Para colmo la resolución final es algo torpe y precipitada, de tal modo que a pesar de la carga emocional que representa "la supuesta sorpresa" para el personaje principal y el espectador, es absurda y burlesca; un anticlimax total.
Puntuación 4/10
Entradas
0 comentarios:
Publicar un comentario