Mayo 18, era una de las película surcoreana que con mayor ansia esperaba de este año, y es lo que esperaba, me ha encantado la película, ha puesto cara a esas personas inocentes que se levantaron contra su propio ejército por su país y que hasta siete años más tarde no fueron recompensados con unas elecciones (aunque su levantamiento provoco que las protestas de su país en otras ciudades se intensificara, además de dar a conocer la situación de Corea del Sur, tanto fuera y dentro del país (mucho aun vivían en la ignorancia)), y ahora lo han sido por medio de una película que hará llegar estos acontecimientos históricos, no muy conocidos fuera de su país, a todo el mundo.
Podéis consultar en cualquier parte pero para tener algo de antecedentes tenéis que saber que todo comenzó con el asesinato del Presidente Park Chung-hee, el 26 de octubre de 1979. La mayor parte del pueblo, vi esperanzas para un futuro mejor, sin un dictador al mando, pero pronto un golpe de estado, comandado por Chun Doo-hwan, les volvió a la dura realidad y de nuevo bajo el control de otro régimen autoritario.
Para acallar las protestas Chun declaró la ley marcial, pero no pudo apaciguar todas las protestas, en concreto las del pueblo de Gwangju.
Para demostrar su autoridad, se desplegó una unidad especial para erradicar la resistencia antigubernamental dando lugar, el 18 de mayo de 1980 (y los nueve días restantes), al conocido el Levantamiento de Gwangju a favor de la Democracia, que provoco, tras una continua represión día a día del ejército, la masacre, causando (aunque las cifrar nunca se han dejado claras del todo) la muerte de 207 residentes de Gwangju y miles de heridos y desaparecidos (vamos que seguro que muertos), la peor matanza de civiles de la historia contemporánea de Corea.
Y volviendo a la pelicula, creo que los 20 min iníciales “acaramelados” de esta película, son necesarios para ver la “inocencia” en que viven los personajes principales, apagando la televisión donde les informan de protestas y de temas políticos que están sucediendo en su país, porque no les interesa, les interesa más sus vidas, y porque no, les interesa más como ligarse a la chica que le gusta que nada mas en el mundo. Me gusta que aunque había revueltas en su país, y en concreto su propia ciudad (por eso estuvo en el punto de mira de los militares, porque era una de las que más difíciles les era erradicar las protestas), los protagonista no fueran protestantes desde el principio, suelen e intentan mirar hacia otro lado, pero a causa de unos terrible acontecimientos deciden ponerse en pie de guerra.
Entre tanto politiqueo y drama, hay tiempo para el amor, siempre lo hay y lo habrá, pero también, hay padres que lloran la muerte de sus hijos, la de amigos, esposos, esposa, hermanos, ….. incluso hijos que lloran la de sus padres. Si no fuera así no estaríamos ante una película que cuenta historia sobre personas humanas que viven un horrendo suceso, sino ante un documental que cuenta un hecho histórico.
Pienso que las cosas pasaron como la película enseña, claro que se tiende a exagerar para impactar mas, y no lo dudo que esta película sea menos, pero no tengo la menor duda que dentro de los que cabe es lo más fiel posible, y si los militares son los malos de la función (es que parece mentira que con las matanzas indiscriminadas que hay y a habido, aun nos preguntemos, y dudemos de ello), en la realidad y en las película los militares surcoreana no se corta dos duros incluso ahora, como vemos en más de una película y en cualquier “telediario” o vía youtube, al igual que no se cortan ningún ejercito de donde sea, tanto ahora como antaño, y aun menos en épocas de dictaduras, y eso era lo que vivían en corea del sur en esa época. Claro que habrá soldados que no estuvieran de acurdo con las matanzas que han hecho (tanto en esta como cualquiera), lo debe haber, no todos son unos robot obedece ordenes, pero no los suficientemente valientes o simplemente los suficientes, para parar a los demás; en la película hay uno que intenta ayudar, y al principio dos se preguntan porque van al Sur a combatir comunistas, en vez de al Norte.
Increíble como varias las cifras de muertos depende de donde lees sobre la historia de corea y en concreto de esta matanza, la de Gwangju, en unos sitios lees miles, en otros cientos. Aquí, en esta película se nombran 207, 2392 heridos, y 987 personas desaparecidas (esta cifra asusta, que ha sido de esta gente?????), y una cosa increíble, que no tenía ni idea, aunque se acuso al gobierno militar de rebeldes (en toda la película los ciudadanos de Gwangju insisten en que ellos no son rebeldes, aman a corea y por eso se oponen a un gobierno autoritario, por eso es tan importante decir que se les acuso a los militares causantes de la matanza de rebeldes), no se identifico a quien dio la orden (así funciona el ejercito, se tapa todo lo que se puede).
Pero vuelvo a irme por la ramas (y es que no puedo evitarlo). Retornando a la película como siempre el apartado técnico es excepcional, y la dirección es muy firme, Kim Ji-hun consigue planos muy emotivos, quizá, demasiado en busca de la lagrima y la emoción fácil, pero sin recrearse en demasiado, y es que a pesar de que la pelicula va a lo simple, sin arriesgarse, no por ello deja deja de ser una gran y efectiva pelicula.
Los actores están perfectos desde el veterano Ahn Sung-kee (Musa the Warrior), al jovencito Lee Jun-gi (The King and the Clown) y Lee Yu-won (When Romance Meets Destiny) acabando con el máximo protagonista Kim Sang-kyung (Memories of Murder), y el gran elenco de secundarios.
En definitiva una excelente película, que sirve como tal, y como lección de historia, además de contarnos una historia de verdaderos héroes que lucharon por lo y los que querían, y creían, y como nunca deben ser olvidados, como tampoco la historia mundial, porque de la historia se debe aprender y no cometer los mismos errores, aunque como sabemos, solo el humano tropieza dos veces con la misma piedra, por lo que esta clase de matanzas y demás atrocidades, se repiten y se repitieran continuamente, pero es nuestro deber, nunca olvidarlas y olvidar a esos inocentes, y una película como esta nos ayuda a no olvidar.
Puntuación 8/10
Un video de los acontecimientos verdaderos.
PD: De paso recomiendo otra película del 2002 (aunque podría recomendar docenas) que cuenta otro de estas cruentas matanzas de nuestra historia contemporánea que me parece soberbia, Bloody Sunday de Paul Greengrass, donde se narra los incidentes ocurridos en Derry, Irlanda del Norte, el día domingo 30 de enero de 1972, donde un grupo de personas se manifestaron en contra de una medida que consistía en encarcelar sin juicio a los sospechosos de pertenecer al IRA (mirar también En el nombre del padre). 14 muertos y 29 heridos, y todo ello ayudo a que las filas del IRA se vieran ampliadas.
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