Había muchísimas ganas de disfrutar de la nueva pelicula de Katsuhito Ishii, "Smuggler" basada en un manga del autor de culto Shohei Manabe. Esta vez parecía que el director volvía a la comedia gangsteril del principio de su carrera después de joyas más surrealistas como "The taste of tea" o "Funky forest", y sobretordo de esa elipsis que supuso "My darling the mountains", y así ha sido: "Smuggler" es otro coctel molotov en forma de comedia negra, violencia desatada(mas de la habitual), un repertorio de personajes raros marca de la casa y ese estilo visual de Ishii, que convierte cada uno de sus trabajos en algo especial. Aunque el resultado quizás resulte un tanto disperso como para llegar a considerarla una de sus mejores peliculas, sin duda merece la pena.
Satoshi Tsumabuki (Villain) interpreta a un joven aspirante a actor llamado Ryosuke que trabaja a tiempo parcial en un salón de pachinko. Cuando las deudas le acechan tiene que comenzar a trabajar en un servicio de recogida de "paquetes" muy especial, en el que junto a dos veteranos, se encargará de recoger y deshacerse de cadáveres.
Katsuhito Ishii ha vuelto a su estilo del principio, de peliculas como "Shark skin man & peach hip girl" o "Party 7", en las que un mcguffin le permite crear su personal universo de personajes variopintos y cruzar sus caminos en situaciones complicadas, dándole a todo un tono de comedia negra. Smuggler es una más de este estilo, en que más que la propia trama lo que interesa es disfrutar con ese surtido de personajes y ver que pasa cuando se encuentran unos a otros, siempre con el aliciente del potentísimo estilo visual del director, y ese aire de comedia que convierten a todas sus peliculas -hasta la más relajada de ellas- en algo realmente especial.
Esta vez la violencia tiene más presencia de lo esperado, incluida escena de tortura, aunque con el particular estilo del director que, aunque consigue una ambientación incómoda, lo aligera con una banda sonora muy especial para deshacerse de la seriedad y convertirla en una escena de comedia.
Otro de los elementos que hace que la cantidad de tiros y golpes incremente exponencialmente es la pareja de asesinos chinos Spine y Naizou, interpretados por Masanobu Ando (Sukiyaki Western Django) y Ryushin Tei (Kaiji), que vestidos a juego con un estilo que recuerda a los gemelos de "The Matrix" consiguen las escenas más divertidas y espectaculares de la pelicula con sus cinemáticos golpes y sus desencuentros particulares.
Ellos son sólo dos de ese reparto de personajes extrañísimos, en este caso formado por un misterioso conductor de camión de pasado oscuro (Masatoshi Nagase), su bizarro colega (el inevitable Tetsuya Gashuin), la joven viuda de un jefe mafioso que parace más preocupada por el dinero en juego que por el cadaver de su marido (Hikari Mitsushima) o una "conseguidora de lo imposible", una especie de versión del mítico Sr. Lobo de "Pulp Fiction" en versión gothic lolita (Yasuko Matsuyuki).
Siendo una pelicula absolutamente coral en que cada uno de sus personajes resalta por algún aspecto, ya sea físico o por su personalidad, es curioso que el personaje elegido como "protagonista" sea uno que no tenga ningún rasgo que resalte, sino precisamente el rasgo de no tener ningún rasgo. Satoshi Tsumabuki interpreta al don nadie con buena mano como es habitual en él a pesar de tener un personaje tan soso y poco lucible, pero queda un poco fuera del resto de ambiente que crean el resto de personajes.
La pelicula es entretenida, visualmente el estilo de Ishii luce como siempre buscando recursos impactantes para el espectador, en este caso por ejemplo con el uso de una cámara superlenta, pero el resultado global queda un poco deslabazado, las tramas no acaban de compactarse como deberían y, aunque resulta divertida y tiene un ritmo que evita los bajones, no acaba de cuajar como se esperaba.
Muy disfrutable, pero teniendo en cuenta las espectativas, que eran muy altas, queda por debajo de lo que esperaba. Aún así, no es cuestión de hacerle ningún tipo de asco a nada que venga firmado por Ishii, el divertimento esta asegurado.
Satoshi Tsumabuki (Villain) interpreta a un joven aspirante a actor llamado Ryosuke que trabaja a tiempo parcial en un salón de pachinko. Cuando las deudas le acechan tiene que comenzar a trabajar en un servicio de recogida de "paquetes" muy especial, en el que junto a dos veteranos, se encargará de recoger y deshacerse de cadáveres.
Katsuhito Ishii ha vuelto a su estilo del principio, de peliculas como "Shark skin man & peach hip girl" o "Party 7", en las que un mcguffin le permite crear su personal universo de personajes variopintos y cruzar sus caminos en situaciones complicadas, dándole a todo un tono de comedia negra. Smuggler es una más de este estilo, en que más que la propia trama lo que interesa es disfrutar con ese surtido de personajes y ver que pasa cuando se encuentran unos a otros, siempre con el aliciente del potentísimo estilo visual del director, y ese aire de comedia que convierten a todas sus peliculas -hasta la más relajada de ellas- en algo realmente especial.
Esta vez la violencia tiene más presencia de lo esperado, incluida escena de tortura, aunque con el particular estilo del director que, aunque consigue una ambientación incómoda, lo aligera con una banda sonora muy especial para deshacerse de la seriedad y convertirla en una escena de comedia.
Otro de los elementos que hace que la cantidad de tiros y golpes incremente exponencialmente es la pareja de asesinos chinos Spine y Naizou, interpretados por Masanobu Ando (Sukiyaki Western Django) y Ryushin Tei (Kaiji), que vestidos a juego con un estilo que recuerda a los gemelos de "The Matrix" consiguen las escenas más divertidas y espectaculares de la pelicula con sus cinemáticos golpes y sus desencuentros particulares.
Ellos son sólo dos de ese reparto de personajes extrañísimos, en este caso formado por un misterioso conductor de camión de pasado oscuro (Masatoshi Nagase), su bizarro colega (el inevitable Tetsuya Gashuin), la joven viuda de un jefe mafioso que parace más preocupada por el dinero en juego que por el cadaver de su marido (Hikari Mitsushima) o una "conseguidora de lo imposible", una especie de versión del mítico Sr. Lobo de "Pulp Fiction" en versión gothic lolita (Yasuko Matsuyuki).
Siendo una pelicula absolutamente coral en que cada uno de sus personajes resalta por algún aspecto, ya sea físico o por su personalidad, es curioso que el personaje elegido como "protagonista" sea uno que no tenga ningún rasgo que resalte, sino precisamente el rasgo de no tener ningún rasgo. Satoshi Tsumabuki interpreta al don nadie con buena mano como es habitual en él a pesar de tener un personaje tan soso y poco lucible, pero queda un poco fuera del resto de ambiente que crean el resto de personajes.
La pelicula es entretenida, visualmente el estilo de Ishii luce como siempre buscando recursos impactantes para el espectador, en este caso por ejemplo con el uso de una cámara superlenta, pero el resultado global queda un poco deslabazado, las tramas no acaban de compactarse como deberían y, aunque resulta divertida y tiene un ritmo que evita los bajones, no acaba de cuajar como se esperaba.
Muy disfrutable, pero teniendo en cuenta las espectativas, que eran muy altas, queda por debajo de lo que esperaba. Aún así, no es cuestión de hacerle ningún tipo de asco a nada que venga firmado por Ishii, el divertimento esta asegurado.
7 de 10
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2 comentarios:
¿Estaremos ante la primera película no genial de Ishii?
Hasta que lo vea no me lo creo XD
Pd: Falta Asano, su actor fetiche junto a Gashuin. ¿Por que? ¿Por que? (Mou dixit)
Falta Asano, hay dos papeles de su perfil, uno el de Nagase (que lo clava) y otro el de la mano derecha del mafioso...
La verdad es que me apetece volver a recuperarla, para comprobar que realmente esta vez no ha dado en la diana.
Espero leer vuestra opinión también, a ver si es cosa mía xD
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