domingo, 10 de febrero de 2013

Ari! Ari! The Korean Cinema.

Más que un documental sobre cine el cine surcoreano, podríamos decir que “Ari Ari! the korean cinema” es una clase magistral sobre el cine del país, una historia oral por boca de los propios implicados. A través de las entrevistas de los dos conductores, el veterano director Chung Ji-young y la actriz Yoon Jin-seo, pasa por delante de la cámara gente del mundo del cine de multitud de ámbitos y épocas: desde los directores más populares hasta independientes, pasando por aquellos veteranos históricos; desde un representante del sindicato de técnicos hasta uno de los mandamases de CJ Entertainment, la compañía más poderosa del país. 
Eso permite al film hablar de la situación del cine coreano en la actualidad, con sus luces y sombras, pero a la vez indagar en como se ha llegado hasta aquí, además de repasar los últimos cuarenta años  del cine del país, en el que la situación social y política ha tenido un papel fundamental.


Arrancando con las diferencias entre las condiciones del trabajo en el mundo del cine del  pasado y el presente, este documental, subdividido en algunos capítulos según la temática del segmento, ofrece una visión completa de la situación del cine surcoreano, una visión bastante menos idílica de lo que podemos tener los seguidores que semana tras semana quedamos alucinados con las cifras de taquilla del cine nacional. Y es que detrás de los 13 millones de espectadores de “The Thieves” o los 12 de “Masquerade” se esconden otras situaciones que el documental, especialmente por boca de los directores más veteranos, refleja de primera mano.
Ya sean problemas a nivel de la propia estructura de la industria del cine, con el monopolio cada vez más absoluto de las grandes compañías, algo que ahoga a los directores independientes y que daña al cine más comprometido, una de las señas de identidad del cine coreano, o a nivel del progreso y la bonanza, que también hace que las estrellas sean más estrellas y se pierda el sentido más familiar que tenían los rodajes hace unos años.


El documental habla del presente apoyándose en el pasado, a través de la experiencia de los directores y actores que sembraron con sus trabajos una filmografía muy importante, cada vez menos desconocida en occidente, uniendo temas importantes con puras anécdotas que aportan el contenido de fondo de manera muy ligera.
Así se repasa tanto el cine de los años sesenta, considerado por todos como la verdadera era dorada del cine coreano, como el de los setenta, en el que la censura pasaba factura, pero que dió lugar al florecimiento del cine como arma cultural contra la situación política del país.

La hora y veinte minutos que dura el documental se pasa volando, y uno solo puede soñar con una versión extendida con el que poder seguir escuchando hablar a todos los directores, actores, productores y gente del mundo del cine que pasa por la pantalla.
El listado de voces invitadas es impresionante, desde leyendas como Im Kwon-taek o Park Kwang-soo, pasando por actores de primer nivel como Moon So-ri o Choi Min-sik, a los directores más populares como Bong Joon-ho y Park Chan-wook, y los independientes como Lee Chang-dong o  Lee chung-ryoul.


Especial atención da la película al papel de la mujer en el cine coreano, tanto detrás de la cámara, con una reunión de algunas de las más importantes directoras coreanas, como delante con el testimonio de actrices hablando de los papeles femeninos, y de las diferencias de trabajo -y de lo que se les pide- por parte de los directores.
Teniendo una camada tan importante y tan interesante de directoras, es un buen punto para el film que se trate del tema y expongan sus condiciones de trabajo y su situación.

Otro de los grandes temas que aborda en profundidad es el de la cuota de cine nacional, desde su instauración en 1966 hasta la lucha por mantenerla en los años 90, en que un grupo de cineastas creó un grupo de vigilancia para su cumplimiento, entre los que se encontraba el director que nos guía en el documental, Chung Ji-young.


Como digo, más que un documental es una verdadera clase magistral sobre cine surcoreano, en su espectacular viaje desde los últimos cincuenta años. A nivel visual la película intenta huir de la pura  consecución de cabezas parlantes, a partir de la propia puesta en escena de las entrevistas, y añadiendo numeroso material de archivo, tanto documental como con las protestas de los 90, como de las propias películas de las que se habla.

Si os gusta, u os interesa mínimamente el cine surcoreano, este documental es extremadamente recomendable para aprender muchísimo sobre tanto el cine como la propia historia reciente del país.

9 de 10

4 comentarios:

Me gustó mucho su crítica y me interesa también el tema. Y porque vivo en un lugar al que no llegan este tipo de trabajos, ¿existe la posibilidad de encontrarlo en alguna parte?

He visto el trailer y esto no me lo pierdo. Demasiados rostros que admiro muchísimo vi que salen en la peli y quiero saber lo que me cuentan. Y eso que el cine coreano "antropológicamente" tampoco es que me interese demasiado (lo mio es la niponofilia), pero este proyecto parece apuntar alto.

Gracias a los dos por los comentarios, vale la pena por la calidad con la que nos habla del cine y de la propia sociedad del país.
Amigo anónimo, de momento ha pasado por cines coreanos, supongo que pasará por algunos festiales, pero se puede encontrar fácilmente en internet.

Un documental sobre cine coreano, buena noticia, parece muy interesante, espero verlo pronto. Gracias por el post, saludos xd

BlogESfera Directorio de Blogs Hispanos - http://elpozodesadako.blogspot.com/ Add to Technorati Favorites Blogs http://www.wikio.es EspaInfo: buscador de España