Desde el primer minuto ya tenemos en pantalla al espíritu que pasea su trauma por "Segunda mano", una película de ambientación, como no, fantasmal, en la que el amor entre un hombre cuya mujer esta desaparecida y una joven no demasiado afortunada, parece maldito. Con un guión bastante manido y trucos, para que engañarnos, bastante vistos, la pelicula si ofrece otros puntos positivos que hacen de ella un buen entretenimiento, y aunque no vaya precisamente a revolucionar el género, si es una propuesta recomendable para los amantes del terror menos meticuloso.
Mabel, la dueña de una tienda de antigüedades que continúa traumatizada por la muetrte de su hermana cuando eran niñas, conoce a Ivan, un arquitecto de éxito y padre de una niña, cuya esposa desapareció sin dejar rastro. Ambos comienzan una relación afectiva, pero comienzan suceder cosas extrañas alrededor de Mabel, algo que se incrementa cuando compra un bolso de segunda mano en la tienda de una amiga.
La previsibilidad de la historia y demás la salva la directora Joyce Bernal con un buen ritmo que hace que la pelicula se pase volando, una buen protagonista, al que da vida Kris Aquino (toda una experta en el género con títulos como "Sukob" o "Dalaw" en su filmografía), y buenos detalles, como el constante uso del agua como recuerdo de la muerte, para guarnecer una historia típica.
El guión retuerce bastante varias tramas, haciendo que a ratos el seguirlas sea un poco confuso, o por lo menos nos haga preguntarnos si en realidad no estan todas conectadas; por un lado tenemos la historia de amor entre el marido de la mujer desaparecida, y la mujer traumatizada por la muerte accidental de su hermana, que se desarrolla muy rapidamente, y con mucha naturalidad. Estos son los mejores momentos de la pelicula en que las apariciones fantasmales comparten protagonismo con el desarrollo de la relación de la pareja, con, eso si, la mirada de la insoportable hija del hombre siempre encima.
Salteadas además estan las constantes apariciones del fantasma, o de objetos relacionados con ella, que vuelven una y otra vez parta atormentar a la protagonista, que por otra parte sufre las visiones del recuerdo traumático de la muerte de su propia hermana. Y por si fuera poco se enfrenta en su relación a la diferencia de status entre ella y su nuevo novio, ya que ella es una chica de origenes más humildes que él, que se mueve en circulos más selectos, con la aparición en el momento menos apropiado de una vieja amiga del arquitecto, una rival en toda regla.
Ese es el caldo de cultivo de la película, que hace fluir esa historia de amor un tanto folletinesco con los traumas de ambos y las apariciones tanto del fantasma, como de esos objetos a través de los que la protagonista se comienza a convertir en la mujer desaparecida, especialmente el bolso (de ahí el segunda mano del título).
Hay unos cuantos buenos sustos, eso si, aunque nada demasiado intenso; en ese sentido tampoco ayuda que técnicamente los efectos queden algo pobres.
Para ser un producto extremadamente típico, los personajes tienen su fondo, algo a lo que no le acaban de sacar partido por desgracia los actores con una Kris Aquino a piñón fijo que, aunque cumple como chica normalita enamorada de chico rico, no acaba de lucir, y un Dindong Dantes que en el tramo final del film se deja llevar llegando a niveles Pacinescos de desfase. Desaprovechadísima queda Angelica Panganiban, una actriz que suele aportar un buen dinamismo a sus películas, como en "Bulong" o "Here comes the bride", pero que aquí queda relegada a un papel de fantasma que no hace más que aparecer y desaparecer de pantalla paseando su tormento. Una pena.
En general se trata de una película de terror que hemos visto mil veces, pero que intenta suplir su falta de originalidad y hasta su previsibilidad aportando una historia y personajes más complejos de lo habitual.
Para ver sin muchos reparos, cumple.
Mabel, la dueña de una tienda de antigüedades que continúa traumatizada por la muetrte de su hermana cuando eran niñas, conoce a Ivan, un arquitecto de éxito y padre de una niña, cuya esposa desapareció sin dejar rastro. Ambos comienzan una relación afectiva, pero comienzan suceder cosas extrañas alrededor de Mabel, algo que se incrementa cuando compra un bolso de segunda mano en la tienda de una amiga.
La previsibilidad de la historia y demás la salva la directora Joyce Bernal con un buen ritmo que hace que la pelicula se pase volando, una buen protagonista, al que da vida Kris Aquino (toda una experta en el género con títulos como "Sukob" o "Dalaw" en su filmografía), y buenos detalles, como el constante uso del agua como recuerdo de la muerte, para guarnecer una historia típica.
El guión retuerce bastante varias tramas, haciendo que a ratos el seguirlas sea un poco confuso, o por lo menos nos haga preguntarnos si en realidad no estan todas conectadas; por un lado tenemos la historia de amor entre el marido de la mujer desaparecida, y la mujer traumatizada por la muerte accidental de su hermana, que se desarrolla muy rapidamente, y con mucha naturalidad. Estos son los mejores momentos de la pelicula en que las apariciones fantasmales comparten protagonismo con el desarrollo de la relación de la pareja, con, eso si, la mirada de la insoportable hija del hombre siempre encima.
Salteadas además estan las constantes apariciones del fantasma, o de objetos relacionados con ella, que vuelven una y otra vez parta atormentar a la protagonista, que por otra parte sufre las visiones del recuerdo traumático de la muerte de su propia hermana. Y por si fuera poco se enfrenta en su relación a la diferencia de status entre ella y su nuevo novio, ya que ella es una chica de origenes más humildes que él, que se mueve en circulos más selectos, con la aparición en el momento menos apropiado de una vieja amiga del arquitecto, una rival en toda regla.
Ese es el caldo de cultivo de la película, que hace fluir esa historia de amor un tanto folletinesco con los traumas de ambos y las apariciones tanto del fantasma, como de esos objetos a través de los que la protagonista se comienza a convertir en la mujer desaparecida, especialmente el bolso (de ahí el segunda mano del título).
Hay unos cuantos buenos sustos, eso si, aunque nada demasiado intenso; en ese sentido tampoco ayuda que técnicamente los efectos queden algo pobres.
Para ser un producto extremadamente típico, los personajes tienen su fondo, algo a lo que no le acaban de sacar partido por desgracia los actores con una Kris Aquino a piñón fijo que, aunque cumple como chica normalita enamorada de chico rico, no acaba de lucir, y un Dindong Dantes que en el tramo final del film se deja llevar llegando a niveles Pacinescos de desfase. Desaprovechadísima queda Angelica Panganiban, una actriz que suele aportar un buen dinamismo a sus películas, como en "Bulong" o "Here comes the bride", pero que aquí queda relegada a un papel de fantasma que no hace más que aparecer y desaparecer de pantalla paseando su tormento. Una pena.
En general se trata de una película de terror que hemos visto mil veces, pero que intenta suplir su falta de originalidad y hasta su previsibilidad aportando una historia y personajes más complejos de lo habitual.
Para ver sin muchos reparos, cumple.
6 de 10
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1 comentarios:
Después de " The Road ", me voy a empezar a fiar más aún de las pelis Filipinas.
Esta que habeis reseñado hoy no pinta mal, y ese 6/10 la verdad que da esperanzas, aunque veamos una vez más lo mismo de siempre.
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